Cinegraf

No siempre hay orden cronológico en los números encuadernados. Algunos número con faltantes.

Investigación y reseña histórica por Mariana Rosales.

Se publicó de forma mensual entre abril de 1932 y diciembre de 1937, editada por Atlántida. En total, 68 ediciones mensuales.
Desde sus inicios y hasta 1937 fue dirigida por Carlos Alberto Pessano, quien había trabajado como crítico cinematográfico en el periódico El Pueblo y el semanario Criterio, ambos de orientación católica. Luego del nombramiento de Pessano como director técnico del Instituto Cinematográfico Argentino (1936), la revista continuó publicándose un año más, hasta que su director anunció su retiro para dedicarse exclusivamente a la gestión estatal.
El valor de venta y su alto nivel de impresión eran dos marcas de distinción en el campo editorial. El precio de $1 era caro en comparación a otras revistas especializadas en la industria del entretenimiento como Antena, Sintonía o Radiolandia. También se distinguía por la calidad del papel: la fibra textil de grueso gramaje en el que se imprimía era muy superior al papel de pulpa de madera convencional. Y esta cualidad de alta calidad hacía lucir las fotografías de estudios como Hurrell, Lippmann, Bachrach, como también los dibujos, caricaturas y demás ilustraciones. La tapa de fondo plateado con líneas geométricas de colores, que presenta fotos de estrellas hollywoodenses, remite a un diseño art decó (Spadachini, 2003).
El abanico de contenidos combinaba informaciones que promocionaban el universo de los grandes estudios de Hollywood, como las notas sobre la vida de las y los miembros del star system acompañadas de producciones fotográficas que mostraban sus retratos, estilos de vida, el detrás de escena de las filmaciones), y las biografías de las estrellas de cine -producciones originales firmadas por los miembros del staff-; las novedades del cine europeo -sobre todo el producido en Alemania-; las críticas cinematográficas de los estrenos internacionales y locales; los textos editoriales de la sección Primer Plano firmados por Carlos Pessano; semblanzas ficcionalizadas y poemas acompañados por ilustraciones.
En el campo de la investigación sobre las publicaciones de cine, algunos autores señalan a Cinegraf como pionera en el desarrollo de una crítica cinematográfica especializada y en posicionarse como un actor que se propuso orientar el proyecto de la incipiente industria cinematográfica local. Pero lejos de tener una visión unívoca, había tensiones en cuanto a su concepción del cine: por un lado como expresión artística ligada a una zona restringida del campo cultural (alta cultura) y al mismo tiempo como objeto y expresión de la cultura de masas (Morales, 2017). En ese sentido, la investigadora Silvia Spadachini destaca que si bien la mayor parte de la información proviene de Hollywood y se enfoca en la vida de las estrellas de cine desde una mirada más bien banal, las editoriales se refieren casi exclusivamente al desarrollo de la industria local y despliegan una fuerte postura conservadora en sus comentarios.
Las ideas nacionalistas y del catolicismo de derecha que guiaban las posiciones estéticas y políticas de su director atravesaron toda la historia de la revista. En primer lugar, se expresaba una preocupación de índole estética sobre el futuro del cine tras el fin del cine mudo. Luego, la pregunta de carácter moral por los personajes y temas controvertidos del cine de producción nacional y del nuevo cine hollywoodense. Y en tercer término, el planteo más de tipo institucional sobre la necesidad de un sistema de censura y de control para la actividad cinematográfica (Morales, 2017: 90). Sobre el cine nacional, la revista operaba en dos sentidos: por un lado reseñaba todos los estrenos del cine local, casi en su totalidad eran destinatarios de una crítica lapidaria, y al mismo tiempo, proponía un programa estético deseable para la incipiente industria local mediante la publicación de fotografías de paisajes que según la revista deberían ser representados en el cine nacional (Morales: 105). A partir de 1934, se comienzan a promocionar los escenarios naturales de la Argentina en una sección donde antes se publicaban paisajes de todo el mundo. El catálogo de imágenes para el relato cinematográfico de lo que se pensaba como auténticamente argentino era realizado por fotógrafos como Manuel Gómez y Juan de Cecco. Los motivos de lo definido como auténticamente nacional conjugaba, por ejemplo, la vegetación de la Quebrada de Humahuaca y una yunta de bueyes con “casas arregladas con buen gusto” retratadas en exteriores, como una estancia en Tandil propiedad de la familia Anchorena, e interiores de otra propiedad de estilo más cosmopolita (“Sugestiones para paisajes de películas, año 5, febrero 1937, n°58) o los edificios castrenses de Campo de Mayo (“Un barrio militar argentino”, septiembre 1937, n°65), ambas notas con fotografías de Manuel Gómez. Por su parte, el lente de Juan de Cecco representaba el paisaje al costado del camino que une San Juan con Calingasta, y los senderos, lagos, y picos nevados de la Patagonia cordillerana (“El Parque Nacional Nahuel Huapi”, diciembre 1937, n°68) (“Escenarios de nuestra tierra”, marzo 1937, n°59).

Fuentes:
Morales, Iván (2017). “La revista Cinegraf (1932-1937): Crítica especializada, modernidad conservadora y la búsqueda de una imagen nacional” en: Perspectivas de la comunicación, vol. 10, n°2, pp. 83-118. Universidad de La Frontera: Chile.
Spadaccini, Silvana (2003). Cinegraf (reseña). En Kriger, Clara (dir.) Páginas de cine. Buenos Aires: Archivo General de la Nación (Pp. 65-68). Recuperado de: http://www.rehime.com.ar/bases/paginasdecine/index.php/Cinegraf
Ramírez Llorens. Disponible en: Intervención estatal en la industria cinematográfica 1936 -1943: El Instituto Cinematográfico del Estado | Fernando Ramírez Llorens - Academia.edu

Auspiciantes: Ocacia cremas, du Maurier filtros, Bagley, La Royal alhajas, Warrington, Casa América, Guerlain, Bayer, Teofani cigarrillos, YPF, Norby, Gath & Chaves, Suchard, Siam, Coty, Lutz Ferrando

Año 1, n. 6 (1932, sept.); Año 3, n. 32 (1934, nov); Año 4, n. 38 (1935, may.); Año 4, n. 39 (1935, jun.); Año 4, n. 41 (1935, ago.) - Año 4, n. 48 (1936, abr.); Año 5, n. 50 (1936, jun.) - Año 6, n. 68 (1937, dic.)

Secciones fijas: Primer plano, Así visten ellas, Mientras se filma, Yo crítico, Así opinan de lo que vemos, Al lado de las estrellas, Las escenas que no serán proyectadas, El cinematógrafo de unos pocos, ... Y le contestamos, Material corto, La cámara sobre..., Placas rápidas